Yoga Sūtras
Aforismos sobre Yoga de Patañjali
Inicio-Home
| Āsanas | Prāṇāyāma | Meditación | YOGA
SŪTRAS | Darśana
Samādhi Pāda | Sādhana
Pāda | Vibhūti
Pāda | KAIVALYA PĀDA | Vocabulario | Bibliografía
Actualizado:
abril 2024
Pātañjalayogaśāstra
(tatas tadvipākānuguṇānām evābhivyaktir
vāsanānām)
180. En estos tres tipos de karma, la manifestación de los impulsos
potenciales se corresponde expresamente con la maduración de sus acciones
concretas.
181. “En estos” se refiere a que hay tres tipos de karma: blanco, negro y gris; “se
corresponde con su maduración” se refiere a que los
impulsos potenciales se corresponden con la maduración del karma relacionado con ellos. Su
manifestación depende exclusivamente de ellos. Cuando
madura el karma celestial, no hay
posibilidad de que se manifiesten otros impulsos potenciales correspondientes
a existencias demoníacas, animales o humanas, y solamente lo que está en
consonancia con la vida celestial es lo que puede manifestarse. El argumento es
el mismo con los otros tipos de karma:
demoníaco, animal o humano.
ततस्तद्विपाकानुगुणानामेवाभिव्यक्तिर्वासनानाम्॥८॥
tatas tadvipākānuguṇānām
evābhivyaktir vāsanānām ||8||
En estos [tres
tipos de karma], la manifestación de los impulsos
potenciales se corresponde expresamente con la maduración [de sus acciones
concretas]
(Traducción propia)
(Otras traducciones)
Vyaas
Houston |
De éstos (tres tipos de karma), la manifestación de los vāsanā-rasgos subliminales, se corresponde específicamente con su fruición |
Georg
Feuerstein |
De aquí [se sigue] solo la manifestación de aquellos rasgos (vāsanās) [en las profundidades de la conciencia] que se corresponden con la fruición de su [karma particular] |
Christopher
Chapple y Yogi Ananda Viraj |
De aquí, la manifestación de las pautas de costumbre se corresponde con la fruición de eso (karma) |
P.
V. Karambelkar |
A partir de éstos (karmas, es decir, aquí karmasaṃskāras) se manifiestan solo (en forma de) tendencias (o deseos), los que son necesarios y adecuados para la fructificación de aquellos (karmas) |
James
Haughton Woods |
Como resultado de esto se sigue la manifestación de aquellas impresiones subconscientes que se corresponden solo con la fruición de su [karma] |
Emilio
García Buendía |
Por ello, la manifestación de las tendencias inconscientes (se produce) solamente acorde al resultado de cada (clase) de aquellas |
Oscar
Pujol |
Por lo tanto, la manifestación de las impresiones latentes se produce en plena correspondencia con la fructificación [del karma] |
Chip Hartranft |
Cada acción se manifiesta tiñendo las impresiones latentes según su cualidad: buena, mala o ambas cosas a la vez |
Vocabulario
tataḥ tat-vipāka-anuguṇānām
eva abhivyaktiḥ vāsanānām
tataḥ (en estos), abhivyaktiḥ (la manifestación) vāsanānām (de los impulsos potenciales) tat-vipāka-anuguṇānām eva (se corresponde expresamente con su maduración)
tad
(tataḥ): (indecl)
en consecuencia, de esta forma, de ahí, desde allí, desde entonces, por eso,
por lo tanto, por consiguiente, así, como, igual que.
tad-: de él, de ellos, suyo.
vipāka-: maduración, fruición; 1) decadencia, deterioro, 2)
efecto o resultado de las acciones.
anuguṇa (anuguṇānām): (f, gen, pl) de los correspondientes, de los que
se corresponde, de los apropiados, de los afines.
eva: (indecl) 1) de esta forma, así, también; exactamente,
verdaderamente, simplemente; 2) ni más ni menos que otro (enfatiza la palabra
precedente); 3) solamente, precisamente.
abhivyakti (abhivyaktiḥ): (f, nom, sg) aparición, manifestación.
vāsanā
(vāsanānām): (f, gen, pl) de los impulsos o
deseos potenciales; 1) externamente sería: de las tendencias psicológicas para
actuar de forma concreta ante una serie de estímulos, es decir, del
comportamiento instintivo; 2) internamente sería: de una configuración o
conjunto de condicionamientos inconscientes o impulsos psíquicos latentes (saṃskāras).
—El vāsanā es como un interruptor, un botón.
Pulsad sobre él y éste acarrea tal comportamiento. Observando un poco, podéis
ver algunos vāsanās en acción en el conjunto del
sistema, en la actitud de la persona, su empaque, su cara, su mirada, su manera
de expresarse, etc. (Desikachar,
TKV “Viniyoga nº 43”).
—Vāsanā
indica las impresiones residuales que se han transformado en tendencias,
deseos, pulsiones. Las huellas físicas de las acciones (semillas) en el fondo
de la conciencia, se acumulan (saṃskāras) y se transforman poco a poco en hábitos que hacen
más fácil el brotar de la acción correspondiente en tendencias que alimentan la
corriente psicomental, las vāsanās (Gardini, Walter “Yoga clásico”).
—Vāsanās son
latencias sepultadas en el subconsciente, de donde surgen los vṛttis. Los vāsanās
alimentan sin descanso a la corriente psicomental, a la serie infinita de los cittavṛttis; y, en virtud de su modalidad específica
(subliminal, germinal), los vāsanās constituyen un obstáculo enorme, pues son
inalcanzables, difíciles de controlar y dominar. Por la misma razón que su
estatuto ontológico es el de la “potencialidad”, su propio dinamismo
obliga a los vāsanās a “actualizarse” en forma de actos de
conciencia. Así, el yogui, aunque tenga una práctica prolongada y haya
recorrido varias etapas de su itinerario ascético, corre peligro de ser vencido
por la invasión de una poderosa corriente de “torbellinos” psicomentales precipitados por los vāsanās. Lo
que caracteriza a la conciencia humana —y al cosmos en su totalidad— es el
circuito ininterrumpido que se establece entre los diferentes niveles
biomentales. Los actos del hombre, suscitados por los estados psicomentales (cittavṛttis), originan efectivamente a su vez otros cittavṛttis.
Pero esos estados de conciencia son a su vez el resultado de la actualización
de las latencias subliminales, de los vāsanās.
Así, el circuito latencias-conciencia-actos-latencias, etc., (vāsanās—vṛttis—karma—vāsanās) no
ofrece solución de continuidad. (Eliade, Mircea “Yoga, inmortalidad y libertad”).
—Debido a que la materia sutil del órgano interno asume todas las
formas que le presentan los sentidos, los objetos tienden a dar a la mente una
forma o carácter y a dejar en ella una impresión o “memoria”, más o menos permanentes. No solo queda como vestigio la forma
del objeto mismo, sino también los sentimientos y pensamientos asociados a
ella, así como la voluntad y determinación de actuar que la forma ha provocado;
y los vestigios más tarde pueden ser reanimados por el impacto de algo nuevo.
De este modo se provocan recuerdos, surgen imágenes de la memoria y se funda la
continuidad del deseo vital, el temor y las formas de conducta. Vāsanās son
las impregnaciones producidas en el cuerpo sutil por el karma anterior;
tienden a causar saṃskāras, cicatrices permanentes que pasan de vida en vida
(Zimmer, H. “Filosofías de
—Cada experiencia deja su huella en la mente profunda (buddhi), la cual a
su vez influye en pensamientos y comportamiento. Estas “huellas” son los saṃskāras. Saṃskāras de similar clase se combinan y forman modelos
definidos o “estelas” (vāsanās) en la mente profunda. Son fuerzas escondidas tras
la vida consciente del hombre y forman el depósito latente de su destino (karmāśaya). A
menos que sean completamente extirpadas mediante la práctica del asaṃprajñātasamādhi, el hombre continuará atrapado en el círculo de
repetidos nacimientos y muertes (Feuerstein, George “Textbook of Yoga”).
—Se puede decir que una actividad voluntaria concreta deja tras de sí
una característica subliminal la cual, en conjunción con otras características
subliminales similares, trae (a su debido tiempo) ciertas consecuencias para el
individuo; también, que por medio de una actividad voluntaria concreta el
individuo acumula mérito o demérito. Los activadores subliminales se combinan
en características que forman el material del depósito de las acciones (karmāśaya). Estos se manifiestan de
acuerdo a la calidad moral de la actividad voluntaria anterior (Feuerstein,
Georg “The Yoga-Sūtra of Patañjali”).
—Escondido detrás de los procesos mentales manifiestos, reside un vasto
e inagotable depósito de estímulos, los denominados “activadores” o saṃskāras, que alimentan la maquinaria de
la conciencia. Estos se organizan en configuraciones conocidas como vāsanās, “huellas” o “rasgos”
subliminales, que se manifiestan parcialmente en la idiosincrasia del
individuo. Este enorme almacén de factores tendenciales constituye el aspecto
dinámico de la estructura profunda de la personalidad humana. Los saṃskāras se forman continuamente como
resultado de la experiencia del individuo. En otras palabras, cada pensamiento,
sentimiento e intención de actuar debe entenderse como una actualización de la
tremenda tensión inherente en el depósito subliminal. Por otro lado, la
actividad mental rellena a su vez dicho depósito subliminal —perpetuando así el círculo vicioso de la existencia fenomenal (saṃsāra). El
depósito de activadores subliminales se concibe como pre-individual. Esto
quiere decir que aunque la experiencia mundana (bhoga) refuerza de alguna manera el entramado de saṃskāras, no los origina. El individuo
recién nacido no es en modo alguno una tabula rasa. Más bien, su nacimiento es
producto del tirón irresistible de las huellas subliminales (Feuerstein, Georg “The Philosophy of Classical Yoga”).
Vyāsa — Yoga-Bhāṣya (s. V.)
4.8(181): tata iti trividhāt
karmaṇaḥ | tad-vipākānuguṇānām
eveti | yaj jātīyasya karmaṇo
yo vipākas tasyānuguṇā
yā vāsanāḥ
karma-vipākam anuśerate,
tāsām evābhivyaktiḥ |
“En estos” se refiere a que hay tres tipos de acciones (karma blanco, negro y gris); “se corresponde con su maduración (tadvipākānuguṇa)” se refiere a que los impulsos potenciales se corresponden con la
maduración de las acciones relacionadas con ellos. Su manifestación depende
exclusivamente de ellas.
4.8(181): na hi daivaṃ
karma vipacyamānaṃ nāraka-tiryaṅ-manuṣya-vāsanābhivyakti-nimittaṃ bhavati | kintu daivānuguṇā
evāsya vāsanā vyajyate
| nāraka-tiryaṅ-manuṣyeṣu
caivaṃ samānaś
carcaḥ ||8||
Cuando
madura el karma celestial,
no hay posibilidad de que se manifiesten otros impulsos potenciales
correspondientes a existencias demoníacas, animales o humanas, y solamente lo
que está en consonancia con la vida celestial es lo que puede manifestarse. El
argumento es el mismo con los otros tipos de karma: demoníaco, animal o humano.
—La razón por la cual existen tales diferencias es porque la
tendencia de la mente a actuar basándose en los cinco obstáculos, como la
comprensión defectuosa, no ha sido eliminada. Estos obstáculos reaparecerán en
el futuro y producirán sus desagradables consecuencias. Solo las prácticas
descritas anteriormente para reducir e inactivar los cinco obstáculos, pueden
garantizar el fin de estas tendencias. La herencia genética, el empleo de
plantas y otros métodos no pueden ser tan eficaces (Desikachar, TKV “Yoga-sūtra de Patañjali”).
—La creación de los vāsanās se halla estrechamente unida a la
maduración (vipāka) de la actividad humana. Mediante vipāka o fructificación no se indica el surgimiento de una acción en el plano
empírico, sino su “consecuencia moral”, expresada en términos de producción de la correspondiente
configuración de vāsanās. Estos vāsanās, a su vez, actúan como fuerzas impulsoras para la creación de un
nuevo organismo individual tras la muerte del actual sujeto. Pueden
considerarse como constelaciones más allá del espacio-tiempo “localizadas” en la estructura profunda
del microcosmos
(Feuerstein, Georg “The
Philosophy of Classical Yoga”).
—Este aforismo afirma simplemente que la manifestación de las
impresiones latentes se corresponde con la fructificación del karma. Así, si la
fructificación del karma proporciona un nacimiento divino, se activarán las
impresiones latentes que proporcionarán un cuerpo y una mente divinos, y no las
impresiones latentes que corresponden a un cuerpo humano o animal. Hay, pues,
una correspondencia entre la fructificación kármica y la activación de las
diferentes impresiones latentes (Pujol,
Oscar “Yogasūtra”, pag 347).
Bhoja — Rāja-Mārtanda
(1018-1060)
||4.8|| iha hi dvividhāḥ
karmavāsanāḥ smṛtimātraphalā
jātyāyurbhōgaphalāśca. tatra
jātyāyurbhōgaphalā ēkānēkajanmabhavā ityanēna
pūrvamēva kṛtanirṇayāḥ.
yāstu smṛtimātraphalāstāsu
tataḥ karmaṇō yēna
karmaṇā yādṛkśarīramārabdhaṅ
dēvamanuṣyatiryagādibhēdēna
tasya vipākasya yā
anuguṇā anurūpā
vāsanāstāsāmēva tasmādabhivyaktiḥ vāsanānāṅ
bhavati. ayamarthaḥ -- yēna
karmaṇā pūrvaṅ
dēvatādiśarīramārabdhaṅ
jātyantaraśatavyavadhānēna punastathāvidhasyaiva śarīrasya||rambhē tadanurūpā ēva smṛtiphalā vāsanāḥ prakaṭī
bhavanti. lōkōttarēṣvēvārthēṣu
tasya smṛtyādayō jāyantē.
itarāstu satyō.pi
avyaktasaṅjñāstiṣṭhanti na tasyāṅ daśāyāṅ
nārakādiśarīrōdbhavā
vāsanā vyaktimāyānti.
En este mundo (iha), las impresiones residuales (vāsanā) provenientes de las acciones (karman) son de dos clases: aquéllas que tienen por fruto
solamente la memoria, y aquéllas que tienen por fruto la forma de la vida, su
duración y su disfrute. En lo que respecta a aquéllas que tienen por fruto la
forma de la vida, su duración y su disfrute, las cuales tienen su origen en una
o varias vidas, éstas han sido ya explicadas anteriormente. Pero la
manifestación de aquéllas que tienen por fruto solamente la memoria, procede de
las acciones (karman). Estas impresiones residuales.
son consecuencia o tienen la misma forma de maduración que aquella acción
mediante la cual se ha obtenido tal o cual cuerpo, sea el de un dios, el de un
hombre o el de un ser intermedio (tiryaga); por tal razón, únicamente, se produce la manifestación de estas
impresiones residuales, El sentido es el siguiente. A consecuencia de aquella
acción por medio de la cual se obtuvo anteriormente, por ejemplo, el cuerpo de
una divinidad, se hacen manifiestas las impresiones residuales cuyo fruto es
únicamente la memoria, en el momento en que se vuelve a obtener un cuerpo de
tal naturaleza, incluso aunque se hayan interpuesto cientos de otras vidas. Y
renacen los recuerdos, etc., incluso respecto de las cosas del otro mundo. Pero
otras ideas, aunque existentes, permanecen sin manifestarse; en este estado no
encuentran manifestación las impresiones residuales cuyo origen está en el
cuerpo de los habitantes de los infiernos (nāraka).
Śaṅkara — Yoga-Bhāṣya-Vivaraṇa (s. VIII-XIV?)
Se ha
ensalzado el aislamiento y ahora van a exponerse las causas que lo
obstaculizan: impurezas (kleśas), karma y grupos de saṃskāras (vāsanās). El efecto de las impurezas, sus antagonistas, y su cesación, ya se
han descrito en detalle. Los próximos sūtras se exponen, pues, con el objeto de explicar de
forma similar y en detalle, las acciones, estados, antagonismos y cesación del karma y los grupos de saṃskāras, pues es únicamente con su cesación con lo que se
logra el aislamiento trascendental. Los grupos de saṃskāras más remotos, habiéndose establecido como
pertenecientes a una clase, tiempo o lugar diferente, no están en inmediata
proximidad al karma que ahora madura. Son como los
amigos y otras relaciones lejanas en relación con los más próximos, los cuales
tienen mayor influencia. Por tanto, los que se encuentran muy distantes no
tienen consecuencias inmediatas.
Objeción: en ese caso, se podría finalizar con la siguiente
conclusión: suponiendo que haya karma depositado desde hace cientos de eones que deba fructificar en un
nacimiento de gato, y que, al mismo tiempo, en el pasado más cercano haya karma que deba fructificar en un nacimiento divino, por oposición al grupo
más cercano de saṃskāras divinos, la
causa potencial que debería cristalizar en el nacimiento como gato no se
actualizaría. Los grupos de saṃskāras del karma de gato, distantes cientos de
eones, no se cumplirían a causa de su lejanía y el karma que habría ocasionado tal fruición no se
actualizaría. La conclusión sería que el karma y los grupos de saṃskāras no serían significativos.
Respuesta: la respuesta a todo esto se da en el siguiente sūtra.
© Yogadarshana – Yoga y Meditación