Yoga Sūtras
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sobre Yoga de Patañjali
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Actualizado: marzo 2024
Pātañjalayogaśāstra
(ahiṃsāsatyāsteyabrahmacaryāparigrahā yamāḥ)
102.
De estos ocho componentes, los yamas son
abstenciones de causar daño, mentir, robar, placeres sensuales y riquezas. De
estos cinco yamas, no causar daño
quiere decir que, de ninguna forma y en ningún caso, se debe causar daño a un
ser. Los otros yamas y los niyamas están enraizados en éste, los
cuales se practican con el único objetivo de perfeccionarle. Los otros se
enseñan como medios para conducir éste a su máxima pureza. A este respecto, se
ha dicho: “cualesquiera actos virtuosos que lleve
a cabo la persona que busca la perfección, ciertamente logrará la paz en toda
su pureza si consigue evitar hacer daño a otros, debido a la ignorancia”. No mentir quiere decir conformidad de palabra y
pensamiento con el objeto; y palabra y pensamiento se refieren a lo que ha sido
visto, oído o inferido de una realidad.
102103. El discurso emitido
para transmitir a otros nuestro propio conocimiento no debe ser engañoso,
inexacto o sin sentido.
103.
Se articula para beneficio de todos los seres y no para
dañarlos. Pero aunque nuestra intención sea buena, si este discurso procura
dolor a otros, pues su último objetivo es hacer daño, no será correcto;
sencillamente se tratará de una equivocación. El discurso que no se ajusta a la
verdad conduce a la dolorosa oscuridad del infierno. Por tanto, se debe decir
la verdad más beneficiosa para todos los seres. Robar es la apropiación
incorrecta de las pertenencias de los demás; evitarlo es no robar, cuya naturaleza
es la ausencia de dicho deseo. La moderación en los placeres sensuales se logra
especialmente controlando el deseo sexual. Abstenerse de riquezas consiste en
renunciar a la posesión de las cosas superfluas al darse cuenta de que
adquirirlas y preservarlas supone apego a ellas, estando sujetos a su pérdida,
de tal forma que se priva a otras personas de su posesión. Éstos son, entonces,
los cinco yamas.
Vyāsa
— Yoga-Bhāṣya
(s. V.)
2.30(102): tatra—
De
estos (ocho componentes),
अहिंसासत्यास्तेयब्रह्मचर्यापरिग्रहा यमाः॥३०॥
ahiṃsāsatyāsteyabrahmacaryāparigrahā
yamāḥ ||30||
Los yamas son [abstenciones de] causar daño, mentir, robar,
placeres sensuales y riquezas
(Traducción
propia)
(Otras
traducciones)
Vyaas Houston |
Ahiṃsa–no
dañar, satya-verdad, asteya-no robar, brahmacarya-resolución espiritual de los deseos y aparigraha-no poseer son los
yamas-disciplinas universales |
Georg Feuerstein |
No dañar, veracidad, no robar,
castidad y ausencia de codicia son las restricciones |
Christopher Chapple y Yogi Ananda
Viraj |
Las restricciones son no violencia,
veracidad, no robar, restricción sexual y no posesión |
P. V. Karambelkar |
Ahiṃsa
(no dañar a nadie), satya
(veracidad hacia todas las cosas), asteya
(no robar, es decir, no poseer algo que pertenezca realmente a otro),-brahmacarya (vida disciplinada de
restricción, especialmente en el tema sexual) y aparigraha (no
recibir, poseer y acumular cosas) son los
yamas |
James Haughton Woods |
Abstinencia de dañar, de falsedad,
de robar, de incontinencia y de aceptar regalos son las abstenciones |
Pandit Usharbudh Arya |
No-violencia, veracidad, no robar,
camino divino en celibato [y] no-satisfacción son los códigos de
autorregulación |
3. Phulgenda Sinha |
Yama
comprende los votos de no-violencia, veracidad, honestidad, retraimiento
sexual y de la codicia |
Emilio García Buendía |
Las
obligaciones de no hacer (son) la no violencia, la veracidad, el no robar, la
abstinencia sexual y la renuncia a lo material |
Oscar Pujol |
Las
restricciones son la no violencia, la verdad, la honestidad, la castidad y la
no aceptación |
Chip Hartranft |
Las cinco
disciplinas externas son el no dañar, la veracidad, no robar, la continencia
y el desprendimiento |
—Estos principios se aplican a
las relaciones con los demás, pero no excluyen la relación con uno mismo
(Bouanchaud, Bernard “The Essence of Yoga”).
Vocabulario
ahiṃsā-satya-asteya-brahmacarya-aparigrahāḥ
yamāḥ
yamāḥ (las abstenciones son) ahiṃsā-satya-asteya-brahmacarya-aparigrahāḥ (no causar daño, decir la verdad, no robar, no disfrutar placeres sensuales y no acumular)
ahiṃsā-: (femenino,
nominativo, singular) no violencia, no desear hacer daño, no desear matar; 1) contrario de hiṃsā; 2) abstenerse de causar daño: primera y
principal abstención (yama) del yoga de los ocho pasos (aṣṭāṅgayoga).
satya-: (neutro) autenticidad, veracidad,
sinceridad, realidad; 1) abstenerse de mentir: segunda abstención (yama) del yoga de
los ocho pasos (aṣṭāṅgayoga).
asteya-: (neutro) no robar, honradez; 1) contrario de steya; 2) abstenerse de robar: tercera abstención (yama) del yoga de
los ocho pasos (aṣṭāṅgayoga).
brahmacarya-: (neutro) 1) conducta regulada por el
ideal, actitud justa; 2) continencia, celibato; 3) conducta encaminada hacia (acarya) el perfeccionamiento, la
verdad, el absoluto (brahma), mediante la moderación
sensual; 4) abstenerse
de placeres sensuales: cuarta abstención (yama) del yoga de
los ocho pasos (aṣṭāṅgayoga).
aparigraha (aparigrahāḥ): (m, nom, pl)
no poseer, no
adquirir; poseer lo justo y necesario, ausencia de avidez; no recibir o aceptar
regalos; pobreza voluntaria; 1) abstenerse
de riquezas: quinta abstención (yama) del yoga de
los ocho pasos (aṣṭāṅgayoga).
yama
(yamāḥ): (m, nom, pl) las abstenciones, las
restricciones; 1) conjunto de cinco conductas
a desarrollar por el yogui con respecto a los demás (ahiṃsā, satya, asteya, brahmacarya, aparigraha); 2) primer miembro del yoga de ocho pasos (aṣṭāṅgayoga).
Otras variaciones del texto original:
tatrāhiṃsāsatyāsteyabrahmacaryāparigrahā yamaḥ
Vyāsa — Yoga-Bhāṣya
(s. V.)
2.30(102):
tatrāhiṃsā sarvathā sarvadā sarva-bhūtānām
anabhidrohaḥ |
De estas (cinco) abstenciones, no causar daño (ahiṃsā) quiere decir
que, de ninguna forma y en ningún caso, se debe causar daño a un ser.
—Ahiṃsā significa no solo la ausencia
de hiṃsā
(ofensa, crueldad, etc.), sino también bondad y consideración; atenta
consideración demostrada a personas y cosas, incluidos nosotros mismos
(Desikachar, TKV “Yoga”).
2.30(102):
uttare ca yama-niyamās tan-mūlās
tat-siddhi-paratayaiva tat-pratipādanāya
pratipādyante,
Las otras abstenciones y las observancias están enraizadas
en ésta, las cuales se practican con el único objetivo de perfeccionarla.
—A veces surgen situaciones en
las que hay que escoger entre dos abstenciones contrapuestas. Las abstenciones
se exponen en orden de prioridad. El primer principio, la no violencia,
comprende a todos los demás. Tiene prioridad sobre el segundo, el segundo sobre
el tercero, y así sucesivamente. En otras palabras, se debe respetar la no
violencia por encima de la verdad y la verdad por encima de la honestidad, la
moderación y la no avaricia (Bouanchaud, Bernard “The Essence of
Yoga”).
—La
observancia de los yamas por
un yoga sādhaka no
tiene como principal objetivo conseguir una sociedad mejor y más disciplinada.
Las observancias se recomiendan para producir una condición mental más
pacífica, que es el primer requisito para la práctica del yoga. Debe evitarse
el quebrantamiento de cualquier yama
porque produciría un efecto mental adverso y conduciría a la ausencia de
tranquilidad. Desde el punto de vista del yoga ahiṃsā no solo se practica para no causar
daño a otros, sino para evitar el efecto negativo de hiṃsā
alterando la mente. Por esta razón no solo debe evitarse la acción real de hiṃsā, es
decir, la que ocasiona realmente un daño a otros. Ciertamente, pensar en dañar
a otros es tan negativo o incluso peor que hacerlo realmente. Hiṃsā
mental es también hiṃsā,
probablemente la peor parte de hiṃsā. Lo
mismo es cierto también para el resto de los yamas (Karambelkar, Dr. P.V. “Pātañjala
Yoga Sūtra”, pag.
240).
2.30(102):
tad avadāta-rūpa-karaṇāyaivopādīyante
|
(Las otras) se enseñan como medios para conducir ésta a su
máxima pureza.
2.30(102):
tathā coktaṃ—na khalv ayaṃ brāhmaṇo yathā yathā vratāni bahūni samāditsate,
tathā tathā pramāda-kṛtebhyo hiṃsā-nidānebhyo
nivartamānas tām evāvadāta-rūpām
ahiṃsāṃ karoti |
A este respecto, se ha dicho (en el comentario de Gāudapāda a la Sāṃkhya Kārikā 23): “cualesquiera actos virtuosos que lleve a cabo la persona
que busca la perfección, ciertamente logrará la paz en toda su pureza si
consigue evitar hacer daño a otros, debido a la
ignorancia”.
2.30(102):
satyaṃ yathārthe
vāṅ-manase |
No mentir (satya) quiere decir
conformidad de palabra y pensamiento con el objeto;
2.30(102):
yathā dṛṣṭaṃ yathānumitaṃ yathā śrutaṃ,
tathā vāṅ manaś
ca |
y palabra y pensamiento se refieren a lo que ha sido visto,
oído o inferido (de una realidad).
2.30(102103):
paratra sva-bodha-saṅkrāntaye vāg uktā,
sā yadi na vañcitā
bhrāntā vā pratipatti-bandhyā vā bhaved iti |
El discurso emitido para transmitir a otros nuestro propio
conocimiento no debe ser engañoso, inexacto o sin sentido.
—La
verdad es la mejor aproximación racional que se puede alcanzar de lo real
(Feuerstein, George “The
Yoga-Sutra of Patanjali”).
2.30(103):
eṣā sarva-bhūtopakārārthaṃ
pravṛttā na bhūtopaghātāya
|
Se articula
para beneficio de todos los seres y no para dañarlos.
—Según
Vyāsa, lo que se diga debe
ser para ayudar a los demás y para comunicarles el conocimiento propio. Por
ello, la comunicación no debería ser engañosa, errónea o estéril. Esta
definición combina la integridad personal con la fidelidad a los hechos
(Feuerstein, George “Encyclopedic
Dictionary of Yoga”).
2.30(103):
yadi caivam apy abhidhīyamānā bhūtopaghāta-paraiva syān na satyaṃ bhavet, pāpam eva bhavet | tena puṇyābhāsena puṇya-pratirūpakeṇa kaṣṭatamaṃ
prāpnuyāt,
Pero aunque nuestra intención sea buena, si este discurso
procura dolor a otros, pues su último objetivo es hacer daño, no será correcto;
sencillamente se tratará de una equivocación. El discurso que no se ajusta a la
verdad conduce a la dolorosa oscuridad del infierno.
2.30(103):
tasmāt parīkṣya
sarva-bhūta-hitaṃ satyaṃ
brūyāt |
Por tanto, se debe decir la verdad más beneficiosa para
todos los seres.
—Según
Vyāsa, decir la verdad es
armonizar los actos que se ejecutan con las palabras que se pronuncian. No se
debe hablar sino para comunicar a otro el conocimiento que se ha adquirido, y
éste debe ser veraz para el bien de los demás. No mentir, no es solamente esforzarse
por decir la verdad, sino también procurar que la palabra que se profiere no
arriesgue causar perjuicio a otro (Varenne, Jean “El
Yoga y la Tradición hindú”).
—Satya no debe dificultar ahiṃsā o ir
en contra. Hay que decir la verdad que es agradable. Abstenerse de decir la
verdad que es desagradable. No decir una mentira aunque sea agradable oírla.
Hay que decir la verdad cuando y solo cuando es buena para los demás
(Desikachar, TKV “Yoga”).
2.30(103):
steyam aśāstra-pūrvakaṃ
dravyāṇāṃ parataḥ
svīkaraṇam | tat-pratiṣedhaḥ
punar asprḥā-rūpam asteyam iti |
Robar es la apropiación incorrecta de las pertenencias de
los demás; evitarlo es la honradez (asteya), cuya naturaleza es la ausencia de
dicho deseo.
2.30(103):
brahmacaryaṃ guptendriyasyopasthasya
saṃyamaḥ |
La moderación en los placeres sensuales (brahmacarya) se logra
especialmente controlando el deseo sexual.
—Brahmacarya indica concretamente la
renuncia a los goces sensuales en favor de la realidad suprema. En sentido
estricto es el celibato, la castidad, la continencia. En sentido más amplio, el
autocontrol de deseos, palabras y acciones (Gardini, Walter “Yoga clásico”).
—Brahmacarya (conducto de Brahma), es el modo de vida del
estudiante védico, llamado brahmacarin. Se
llama conducto de Brahma porque el brahman trasciende toda clase de distinciones (Feuerstein, George “Encyclopedic Dictionary of Yoga”).
—Según
Śaṅkarācārya,
un brahmacarin es aquel que se ha ensimismado
en el estudio del saber védico sagrado, el que se mueve constantemente en el brahman y quien sabe que el brahman está presente en todo
(Iyengar, BKS “Viniyoga”).
—Brahmacarya es moverse en dirección a la
verdad; es decir, que debemos crear unas condiciones en nuestras relaciones
hacia los demás y hacia las cosas, que facilite el entendimiento de las
verdades más altas. Si nos movemos hacia el entendimiento de la verdad y aparecen
los placeres sensuales, debemos conservar nuestra dirección y no perdernos
(Desikachar, TKV “Yoga”).
—Según
Lacombe, en la antigüedad los textos brahmánicos no manifiestan ningún miedo de
la sexualidad, incluso ni cuando recomiendan con énfasis la castidad con fines
espirituales. Es a partir de una cierta época en que una literatura edificante
intentará provocar la repulsa y el temor de la carne y de la mujer. Pero se
trata de una actitud que, al menos en sus comienzos, es más refleja y
voluntaria que espontánea. La obra de Patañjali
está escrita en el momento de predominio de esta “literatura
edificante” y está claro que, según la
palabra sánscrita brahmacarya,
castidad se identifica con el comportamiento brahmánico que, de la voluntaria
decisión de un grupo pasó a ser un prestigio, para convertirse finalmente en
una exigencia (Moreno Lara, Xavier “El
Yoga clásico”).
—En un
sentido exacto, brahmacarya es la automoderación con
respecto a todo, como comer, dormir y obtener placer de toda clase. Un bhogi (quien se complace en
disfrutar de toda clase de placeres) se convierte en rogi (quien sufre dolencias);
mientras que un yogui permanece libre de cualquier clase de sufrimiento (Nivedita I, Desai “Yoga
Institute Magazin”).
—La
continencia o control de ninguna forma contradice o se opone a la alegría del
placer. Realmente la intensifica. Brahmacarya se
viola solo cuando el placer es la única motivación (Iyengar, BKS “Light on
the Yoga Sūtras of Patañjali”).
—Brahmacarya se
traduce generalmente como continencia o abstinencia sexual, celibato, castidad,
etc. Pero la palabra brahmacarya está
compuesta de dos palabras: brahma (n),
la Realidad suprema (la palabra brahman es el
término vedántico para la Realidad o Principio Supremo. Pero este significado
tan específico no es apropiado cuando se utiliza para formar el compuesto brahmacarya o
cuando se utiliza por otros Darśanas) + carya, forma de comportarse. Así el
significado básico y amplio de brahmacarya es
una forma de comportamiento que ayuda al sādhaka a alcanzar el objetivo espiritual más elevado. En
consecuencia, brahmacarya debe
entenderse como una vida correctamente disciplinada para lograr el progreso
espiritual y la realización última (Karambelkar, Dr. P.V. “Pātañjala Yoga Sūtra”, pag.
242).
2.30(103):
viṣayāṇām arjana-rakṣaṇa-kṣaya-saṅga-hiṃsā-doṣa-darśanād asvīkaraṇam
aparigraha ity ete yamāḥ ||30||
Abstenerse de riquezas (aparigraha) consiste en
renunciar a la posesión de las cosas superfluas al darse cuenta de que
adquirirlas y preservarlas supone apego a ellas, (estando sujetos a) su
pérdida, (de tal forma que) se priva a otras personas de su posesión. Éstas
son, entonces, las (cinco) abstenciones.
—Aparigraha, la no codicia, la ausencia de
avidez, es un complemento de asteya, la
honestidad, con matiz más acentuado sobre la pobreza voluntaria. Se debe ver en
esto una alusión a la ambición u orgullo (Gardini, Walter “Yoga clásico”).
—Aparigraha es “no usurpar”. Parigraha es lo opuesto de dāna (dar). Se utiliza aparigraha para
significar “recibir exactamente lo que es
justo”; debemos recibir solo lo que
merecemos; de otro modo es explotación y, además, recibir injustas recompensas
tiende a crear obligaciones y ataduras (Desikachar, TKV “Yoga”).
—Aparigraha, según Bhoja, consiste en no estar poseído por lo que se posee (Font,
J.G. “Dioses, ideas y símbolos de la
India”).
Bhoja — Rāja-Mārtanda (1018-1060)
||2.30|| tatra prāṇaviyōgaprayōjanavyāpārō
hiṅsā. sā ca sarvānarthahētuḥ.
tadabhāvō.hiṅsā. hiṅsāyāḥ sarvakālaṅ
parihāryatvātprathamaṅ tadabhāvarūpāyā ahiṅsāyā
nirdēśaḥ. satyaṅ
vāṅmanasayōryathārthatvam. stēyaṅ parasvāpaharaṇaṅ
tadabhāvō.stēyam. brahmacaryamupasthasaṅyamaḥ.
aparigrahō bhōgasādhanānāmanaṅgīkāraḥ.
ta ētē.hiṅsādayaḥ
pañca yamaśabdavācyā yōgā.ṅgatvēna nirdiṣṭāḥ.
De éstos, la violencia es actuar con el propósito de quitar
la vida y es la razón de ser de todo mal (anartha) ; su
ausencia es la no violencia (ahiṃsā). Se hace primeramente
mención a la no violencia, representada por la ausencia de violencia, porque
ésta debe ser evitada en toda ocasión. Veracidad es conformidad de palabra y
pensamiento (manas). Robo es el apoderarse de la
propiedad de otro; la ausencia de esto es el no robar. Castidad es el control (saṃyama) del sexo (upastha). Carencia de ambición es la no
apropiación de los medios que conducen a la fruición. Estas cinco empezando por
la no violencia son denominadas por la palabra abstenciones, y son consideradas
como miembros del Yoga.
Śaṅkara —
Yoga-Bhāṣya-Vivaraṇa (s. VIII-XIV?)
Cuando se logra un conocimiento, a través de medios
apropiados para ello, la comunicación del mismo a otros tal y como es dicho
conocimiento se denomina verdad. El conocimiento debe expresarse sin ánimo de
engañar al otro; debe corresponderse con lo que es cierto y debe enriquecer al
oyente, sin mantener expresiones ambiguas, argumentos inconclusos, dichos
oscuros o arcaicos, etc. Así, lo expresado con sinceridad y sin defectos trae
la verdad; sin embargo, aquella realidad que ocasiona daño, aunque tenga la
fuerza de la verdad, no equivale (realmente) a la verdad. Robar no puede
existir en quienes han eliminado todo deseo; no robar es el rechazo de tal
acción que surge de la ausencia de deseo.
© Yogadarshana – Yoga y
Meditación