Yoga Sūtras
Aforismos sobre Yoga de Patañjali
Inicio-Home
| Āsanas | Prāṇāyāma | Meditación | YOGA SŪTRAS | Darśana
Samādhi Pāda | SĀDHANA PĀDA | Vibhūti Pāda
| Kaivalya Pāda
| Vocabulario | Bibliografía
Actualizado:
marzo 2024
Pātañjalayogaśāstra
(śaucāt svāṅgajugupsā parair asaṃsargaḥ)
109. A continuación, algunas
aclaraciones con respecto a los niyamas
Con la pureza corporal surge la preocupación por el propio cuerpo y la
protección ante el contacto con cualquier otro. Cuando el yogui protege su
propio cuerpo comienza resueltamente a practicar la limpieza; al darse cuenta
de sus defectos físicos adquiere autocontrol de su cuerpo y se convierte en un
asceta desprendido. Además, también surge desinterés por relacionarse con
otros, pues contempla la verdadera naturaleza corporal e incluso llega a desear
el abandono del propio cuerpo al comprender que no puede purificarse
totalmente, incluso tras lavarse con agua y otros elementos; ¿cómo podría
relacionarse con los cuerpos impuros de los demás?
Vyāsa — Yoga-Bhāṣya (s. V.)
2.40(109): niyameṣu vakṣyāmaḥ—
(A continuación,) algunas aclaraciones con respecto
a las observancias.
शौचात्स्वाङ्गजुगुप्सा परैरसंसर्गः॥४०॥
śaucāt
svāṅgajugupsā parair asaṃsargaḥ ||40||
Con la pureza (corporal) (surge) la preocupación por el propio cuerpo (y la
protección ante) el contacto con cualquier otro
(Traducción propia)
(Otras traducciones)
Vyaas
Houston |
Debido
a śauca–pureza, hay deseo de
proteger el propio cuerpo evitando el contacto con cualquier cosa adversa (a
él) |
Georg
Feuerstein |
A
través de la pureza [se] distancia (jugupsā)
de su propio cuerpo, [y se adquiere el deseo de] no ser contaminado por otros |
Christopher
Chapple y Yogi Ananda Viraj |
De
la pureza surge disgusto por el propio cuerpo y no contacto con otros |
P.
V. Karambelkar |
Mediante
(la observación del niyama, es
decir, de la regla de) śauca
(resulta) disgusto hacia el propio cuerpo (y) rechazo a ser tocado por otros |
James
Haughton Woods |
Como
resultado de la limpieza hay disgusto hacia el propio cuerpo y falta de
relación con otros |
Pandit
Usharbudh Arya |
A
través de la práctica de limpieza y pureza [se desarrolla] rechazo hacia el
[propio] cuerpo e [inclinación] a no [tener] contacto con otros [cuerpos] |
13. Phulgenda
Sinha |
Manteniendo
el cuerpo limpio, finaliza el disgusto con uno mismo y el rechazo a entrar en
contacto con otros |
Emilio
García Buendía |
Por
la pureza (surge) el rechazo hacia el propio cuerpo y el no contacto con los
otros |
Oscar
Pujol |
El
efecto de la pureza es el disgusto por el propio cuerpo y la falta de
contacto con otros |
Chip Hartranft |
Mediante
la purificación corporal el cuerpo deja de actuar compulsivamente, y se
comporta del mismo modo en su contacto con los demás |
Vocabulario
śaucāt sva-aṅga-jugupsā paraiḥ-asaṃsargaḥ
śaucāt (con la
pureza), sva-aṅga-jugupsā (preocupación por el propio cuerpo) paraiḥ-asaṃsargaḥ (no asociación con otros)
śauca (śaucāt): (m, abl,
sg) con la pureza, mediante la limpieza; 1) a partir de la limpieza o purificación, tanto interna, como externa; 2) una de las
cinco observancias (niyama) que constituyen el segundo
miembro del yoga de ocho pasos (aṣṭāṅgayoga).
sva-: propiedad, posesión, objeto poseído; 1) (pronombre personal referido al sujeto de la oración) el, su, este.
aṅga-: miembro, componente,
parte, accesorio, atributo esencial; cuerpo físico.
jugupsā: (f, nom, sg)
disgusto, aversión, rechazo, censura, distanciamiento; 1) deseo de proteger,
preocupación, tutela.
—El interesante término jugupsā, comúnmente traducido como “disgusto”, conlleva realmente una idea
más positiva, es decir, la de permanecer en guardia con respecto al cuerpo, la
de mantener una actitud de desapego hacia nuestra mortal envoltura. Al mismo
tiempo, sin embargo, el yogui se preocupa de no renovar la contaminación (es
decir, la distracción) por los otros, optando en consecuencia por una vida
solitaria en el bosque o en las montañas. Esto podría parecer un estúpido
esnobismo de su parte, pero la actitud del yogui no es de desprecio o
descrédito, sino de cautela. Mientras no logre el perfecto autocontrol,
comprensiblemente no deseará correr el más mínimo riesgo de desviarse de su
difícil y precario proyecto (Feuerstein, Georg “The Yoga-Sūtra of Patañjali”).
para (paraiḥ): (m, ins, pl) mediante lo supremo, con lo superior, a través de lo profundo o
elevado 1) mediante lo otro, con lo diferente, por medio de lo siguiente; 2)
indica la idea de ir más allá.
asaṃsarga (asaṃsargaḥ): (m, nom, sg) no asociación, no
contaminación, no contacto; 1) aislamiento.
Vyāsa — Yoga-Bhāṣya (s. V.)
2.40(109):
svāṅge jugupsāyāṃ
śaucam ārambhamāṇaḥ
kāyāvadyadarśī kāyān abhiṣvaṅgī
yatir bhavati |
Cuando (el yogui) protege su
propio cuerpo comienza resueltamente a practicar la
limpieza; al darse cuenta de sus defectos físicos adquiere
autocontrol de su cuerpo y se convierte en un asceta desprendido.
2.40(109):
kiṃ ca, parair asaṃsargaḥ
kāya-svabhāvāvalokī svam api kāyaṃ jihāsur
mṛj-jalādibhir ākṣālayann api kāya-śuddhim
apaśyan kathaṃ para-kāyair atyantam evāprayataiḥ
saṃsṛjyeta ||40||
Además, también surge desinterés por relacionarse
con otros, pues contempla la verdadera naturaleza corporal e incluso llega a
desear el abandono del propio cuerpo al comprender que no puede purificarse
(totalmente), incluso tras lavarse con agua y otros elementos; ¿cómo podría
relacionarse con los cuerpos impuros de los demás?
—Este sūtra puede
interpretarse como la declaración de que, con la limpieza corporal, el yogui se
vuelve cada vez más consciente de hasta qué punto está contaminado, con lo cual
acrecienta el estímulo para llegar a convertir su cuerpo en digno templo de lo
divino y buscar únicamente la compañía de individuos igualmente purificados
(Burley, Mikel “Hatha-Yoga - Its Context, Theory and
Practice”).
—Este sūtra no
pretende implicar una aversión o disgusto hacia el cuerpo, sino una actitud de
discernimiento y desprendimiento basada en un respeto saludable por el cuerpo
como un vehículo para la purificación de la conciencia; el yogui ya no está
esclavizado ni consumido por una mera identificación del sí-mismo con el cuerpo
y no contamina el cuerpo a través del contacto no saludable con los demás
(Whicher, Ian "Nirodha, yoga
praxis and the transformation of
the mind", pag 360, nota 186).
—La analogía con la medicina de Vyāsa es
interesante porque ayuda a erradicar el fundamento de la actitud de disgusto (jugupsā) hacia el cuerpo y revela su significado profundo. La palabra “jugupsā” deriva de la raíz √gup que significa principalmente “proteger,
guardar, defender, preservar”. También tiene el significado de “evitar,
detestar, rehuir, eludir”, pero su acepción más común ha estado siempre
en conexión con lo secreto, con el tipo de conocimiento que debe mantenerse
separado del ignorante o no iniciado y protegido de un uso incorrecto. Si
leemos el verso YS II.40 en relación con la analogía médica de Vyāsa,
podemos traducirlo como: “La preocupación por el propio cuerpo y la protección
ante su contacto con otros surge a partir de la práctica de purificación”. Esta
forma de traducir el verso muestra el cuerpo como algo valioso, algo a lo que
hay que cuidar y ello supone ser coherente con la exposición de Patañjali sobre
la enfermedad (vyādhi), así como con el conocimiento del Āyurveda sobre el cuerpo.
Ciertamente, Patañjali (YS I.30) menciona la enfermedad como el
primero de los nueve obstáculos que impiden el estado contemplativo (samādhi) y Vyāsa (YBh III.29) cita
en el comentario siete constituyentes corporales que muestran su familiaridad
con la ciencia médica de su tiempo. La palabra “jugupsā” entendida como “protección”, refleja en el Yoga
Sutra un aspecto del cuerpo más neutral y científico: “en el momento en que
el yogui protege su cuerpo (svāṅge jugupsā), comienza (ārambhamāṇaḥ) la práctica de la limpieza (śaucam). Mediante la observación de sus defectos físicos e
imperfecciones (kāyāvadyadarśī kāyān abhiṣvaṅgī), adquiere autocontrol (yatir bhavati). ¿Por qué motivo (kiṃ ca), quien es consciente de la condición de su propio
cuerpo (kāya-svabhāvāvalokī), se mezclaría con otros (parair asaṃsargaḥ), [cuando] lo que en realidad desea es mantenerse
apartado incluso de su propio cuerpo (svam api kāyaṃ jihāsur) [a raíz de] no considerar el cuerpo limpio (kāya-śuddhim apaśyan), incluso después de que —su propia morada (ākṣālayann api)— haya sido purificada con agua y otros elementos (mṛj-jalādibhir)? ¿Cómo, pues (kathaṃ) podría mezclarse (saṃsṛjyeta) con otros cuerpos (para-kāyair), cuando no están en condiciones apropiadas (aprayataiḥ) y son extremadamente impuros (atyantam eva)? (YBh II.40)”. Traducido de esta forma se observa una preocupación por mantener al
cuerpo libre de agentes que puedan dañarlo. Cualquiera que siendo consciente de
su propio cuerpo tenga alguna impureza o sufra de alguna enfermedad, querrá
mantenerse aparte de otros cuerpos para evitar contagiarlos. ¡Cuánto más
desearía evitar el contacto con otros cuerpos si ello supusiese una amenaza
para su propio bienestar o salud! El disgusto, entonces, no es del cuerpo per se, sino de los factores que
convierten al cuerpo en impuro. Por tanto, se debe proteger el cuerpo contra
las impurezas. Lo natural para el cuerpo es volverse impuro, igual que es
natural para la mente volverse ignorante. Sin embargo, esto no implica que el
cuerpo esté predeterminado a permanecer impuro, igual que la mente no está
predeterminada a permanecer ignorante. Patañjali mismo admite en el tercer
libro que el cuerpo puede alcanzar el estado de perfección (Funes Maderey, Ana Laura "The Perfect Body in Classical Yoga
Philosophy", pag 41-42).
Bhoja —
Rāja-Mārtanda (1018-1060)
||2.40|| yaḥ śaucaṅ
bhāvayati tasya svāṅgēṣvapi
kāraṇasvarūpaparyālōcanadvārēṇa
jugupsā ghṛṇā samupajāyatē.śucirayaṅ
kāyō nātrā||grahaḥ kārya iti amunaiva
hētunā parairanyaiśca
kāyavadbhirasaṅsargaḥ saṅsargābhāvaḥ saṅsargaparivarjanamityarthaḥ.
yaḥ kila svamēva
kāyaṅ jugupsatē
tattadavadyadarśanātsa kathaṅ
parakīyaistathābhūtaiḥ kāyaiḥ saṅsargamanubhavati.
En aquél que
ha conseguido la pureza, nace un disgusto, una aversión, incluso por su propio
cuerpo, como resultado de la cabal comprensión de su naturaleza y de sus
causas. Y se dice, entonces: “Este cuerpo es impuro y no debe haber apego a
él”. Y por esta misma razón, se rechaza la unión o relación con otras personas,
es decir, se evita su contacto. Este es el sentido. Pues, ¿cómo podría ser
posible que al que siente disgusto por su propio cuerpo, por haber percibido
tal o cual defecto en él, le gustase la unión con los cuerpos, semejantes, de
otras personas?
© Yogadarshana – Yoga y Meditación