Yoga Sūtras
Aforismos sobre Yoga de Patañjali
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Actualizado:
marzo 2024
Pātañjalayogaśāstra
(śāntoditāvyapadeśyadharmānupātī
dharmī)
132. Entre estos cambios, la
substancia inmutable es lo que permanece tras las formas pasada, presente y
futura. En esencia, la forma es la actualización de la potencialidad de la
substancia. La forma se considera que tiene existencia real de
acuerdo a los distintos efectos que genera con sus acciones. De estas formas, la que ejerce sus propias funciones se considera en
presente, y se distingue de otras que están inmóviles en el pasado o
indeterminadas en el futuro. Pero cuando la forma se sumerge
de nuevo en la substancia, siendo entonces de la misma naturaleza que la
substancia, ¿cómo podría esa forma diferenciarse de otra?
133. Como es sabido, en la substancia
hay tres formas: inmóviles o pasadas, activas o presentes e indeterminadas o
futuras. De éstas, las inmóviles son aquellas que, habiendo estado activas, han
cesado ahora en su actividad; las activas son las que ahora están ejerciendo
sus funciones y tienen como procedencia inmediata la fase temporal futura.
Igualmente, las que están ahora en el pasado tienen como procedencia inmediata
el presente. ¿Por qué la presente no procede de la pasada? Porque
entre ellas no hay relación de antes y después. La
relación de anterioridad y posterioridad en el caso del futuro con el presente,
no es la misma que la existente entre el presente y el pasado. No hay
posterioridad en el pasado. De la misma forma, en el futuro solo hay
anterioridad respecto del presente. ¿Cuáles son las formas indeterminadas? Todo participa
de la naturaleza de todo. Sobre esto se ha dicho: “toda forma, como el sabor y otros elementos sutiles, se encuentra
contenido en los elementos más toscos, como el agua, la tierra,
etc.; igualmente, estos elementos se pueden observar en las plantas y éstas, a
su vez en los animales”.
133134. Así pues, dado que la naturaleza común no se destruye, todo,
independientemente de su clase, posee la naturaleza de todo.
134.
Sometidas a las influencias de lugar, tiempo, forma y causa, las
formas no se manifiestan de manera simultánea. Lo
que permanece a través de estas formas, sean manifiestas o no, que está
presente en todo pero es distinto de todo, cuya esencia es tanto particular
como genérica, es la substancia. Pero para algunos que mantienen
que este mundo son solo formas sin soporte permanente alguno, no podría haber
experiencia. ¿Por qué? Porque cuando una conciencia ha llevado a cabo una acción, ¿cómo podría otra distinta ser responsable de tal acción, en el sentido
de experimentar sus efectos? Además no habría memoria de ésta
conciencia: nadie recuerda lo que ha experimentado otro. A partir del argumento del reconocimiento, debe admitirse que hay una
substancia permanente que persiste a través de los cambios de forma. Por tanto,
no es cierto que este mundo sea solo cuestión de formas, sin una substancia
presente en todo pero distinta de todo.
Vyāsa — Yoga-Bhāṣya (s. V.)
3.14(132): tatra—
Entre estos
(cambios),
शान्तोदिताव्यपदेश्यधर्मानुपाती धर्मी॥१४॥
śāntoditāvyapadeśyadharmānupātī
dharmī ||14||
La substancia [inmutable] es lo que permanece tras las
formas pasada, presente y futura
(Traducción propia)
(Otras traducciones)
Vyaas Houston |
La
forma esencial (dharmī) se
ajusta a la forma característica, que puede estar inmóvil, activa e
indistinguible (pasado, presente y futuro) |
Georg
Feuerstein |
El
que “soporta la forma” (dharmī) [es decir,
la substancia] es lo que se ajusta a la forma (dharma) inactiva, surgida o indeterminada |
Christopher
Chapple y Yogi Ananda Viraj |
El
que soporta el dharma se corresponde al dharma inmóvil, surgido
o indeterminado (pasado, presente o futuro) |
P.
V. Karambelkar |
Es
inherente al dharmī (=el que
lleva o soporta los dharmas) los dharmas (propiedades básicas) (que
han) pasado, (están) manifiestos (e incluso) inmanifiestos |
James
Haughton Woods |
La
substancia se ajusta a los aspectos externos inactivo, surgido e
indeterminado |
42. Phulgenda Sinha |
(Como
continuación de lo establecido en los Sūtra precedentes, se
aclara que) Lo relacionado con la propiedad (Bhūta) es lo que
resulta común a lo pasado, a lo que surge en el presente y a lo que surgirá
en el futuro o a lo que aún no se ha manifestado |
Emilio
García Buendía |
La
substancia (consiste en aquello) que tiene la propiedad de pasar por (los
estados de) inactivo, manifestado o indeterminado |
Oscar
Pujol |
El
substrato es el correlato de las propiedades pasadas, presentes y futuras |
Chip Hartranft |
La
sustancia es inmutable, ya sea antes, durante o después de adquirir una
determinada forma |
Vocabulario
śānta-udita-avyapadeśya-dharma-anupātī
dharmī
dharmī (la substancia inmutable) śānta-udita-avyapadeśya-dharma-anupātī (es lo que permanece tras las formas inmóvil,
activa e indeterminada)
śānta-: inmóvil, quieto,
pacífico, imperturbable; 1) el objeto en tiempo pasado;
udita-: surgido, aparecido, activo,
actual; 1)
objeto referido al tiempo presente; 2) objeto que surge, que se aparece o
muestra.
avyapadeśya-: indeterminado, indefinido; 1) sutil,
escondido, indeterminable, indescriptible, aún no manifestado; 2) futuro.
dharma-: 1) virtud, mérito; 2) deber, justicia, ley natural, religión, orden establecido, costumbre,
institución, obligación individual o colectiva (física, moral o espiritual); 3) forma, aspecto cambiante, cualidad, propiedad, función, atributo,
característica de un objeto.
anupātin (anupātī): (m, nom, sg) seguir o ir tras algo como
consecuencia o resultado; tratar de conseguir algo, proseguir, continuar; de
acuerdo o conforme a algo.
dharmin
(dharmī): (m, nom, sg) poseedor del dharma; 1) naturaleza esencial subyacente o “substancia” inmutable
(dravya) de un objeto, en oposición a su forma cambiante (dharma), es decir, lo que lleva los atributos; 2) se identifica con la fuente
de la manifestación (pradhāna), la materia primordial (prakṛti), lo indeterminado (aliṅga) y lo inmanifestado (avyakta).
—La palabra dharmin se traduce como “substancia”. Al ser un tema terminado en –in normalmente son adjetivos que indican posesión como
por ejemplo balin significa “poderoso” en el sentido de aquel que tiene la propiedad de la fuerza (bala). En este sentido, la substancia (dharmin) haría referencia a aquello que posee o que tiene
cualidades (dharma) por lo que en sánscrito se caracteriza a la substancia como aquella
entidad capaz de tener cualidades o propiedades (Buendía, Emilio García “El yoga como sistema filosófico”, pag, 369).
—El dharmī no es la Realidad última, el puruṣa-tattva, el cual no puede tener
atributos o dharmas. Tal
Realidad se revela solo en el último momento. Hasta entonces esta realidad está
cubierta por envolturas o capas debido al saṃyoga o avidyā que, en esencia son prakṛtika y esta realidad secundaria es el
dharmī que
permanece constante en todas sus transformaciones (Karambelkar, Dr. P.V. “Pātañjala Yoga Sūtra”, pag.
390).
Vyāsa — Yoga-Bhāṣya (s. V.)
3.14(132): yogyatāvacchinnā dharmiṇaḥ
śaktir eva dharmaḥ
|
En esencia, la forma (dharma) es la
actualización de la potencialidad de la substancia (dharmin).
— De
acuerdo con el Yoga Kośa (p. 150), los dharma-s del dharmin son los objetos que adoptan
cualquier forma en la que el dharmin pueda existir. De esta manera,
tanto niruddha como vyuthitta citta-s (conciencia inmóvil y activa)
son dharma-s de citta; citta
misma es el dharma de asmitā-mātra (“sentido del puro yo”), por lo tanto, asmitā-mātra es el dharmin de citta. Asmitā-mātra es el dharma del liṅga-mātra
(“mero
designador”),
y así sucesivamente. Aliṅga (“lo no manifiesto”) es el último dharmin, que no es un dharma de ningún otro dharmin. A este respecto ver también YS 2.19; J. H. Woods (1998,
p. 224) traduce los términos śānta, udita y avyapadeśya refiriéndose al pasado,
presente y futuro, más literalmente, como lo inactivo, lo surgido y lo
indeterminable (Raveh, Daniel “Exploring The Yoga Sutras. Philosophy and Translation",
pag 141, nota 32).
3.14(132): sa ca phala-prasava-bhedānumita-sad-bhāva ekasyānyo’nyaś ca paridṛṣṭaḥ |
(La forma)
se considera que tiene existencia real de acuerdo a los distintos efectos que
genera con sus acciones (como una u otra forma del uno, dharmin).
—Todas las cualidades, manifestadas o inmanifestadas
de los diferentes elementos, se considera que están inherentes en un substrato
del cual se derivan y al que se da el nombre de dharmin
por ser la madre de los dharma. Este substrato, raíz de todas las propiedades, no
es otra cosa que la materia o prakṛti (Taimni, I.K. “La ciencia de la Yoga”).
3.14(132): tatra vartamānaḥ
sva-vyāpāram anubhavan
dharmo dharmānatarebhyaḥ
śāntebhyaś cāvyapadeśebhyaś
ca bhidyate |
De estas
(formas), la que ejerce sus propias funciones se considera en presente, y se
distingue de otras formas que están inmóviles (en el pasado) o indeterminadas
(en el futuro).
—Podemos
notar que la mente (dharmin) esta quieta e inmóvil (śānta); o
está activa a través de la ideación (udita); o no está
quieta ni activa sino que sigue siendo un misterio acerca del cual nada puede
notarse o decirse (avyapadeśya). Esta última es una característica que, por
decirlo así, aún ha de nacer y asumir una forma notable u observable. Los no
yoguis la describen vagamente como el “futuro”. La característica suscitada o activa de la mente
se conoce como el “presente”; y la quietud o inactividad de la mente como el “pasado”.
Estas tres características coexisten en la mente; pero parecen ser secuenciales
y, por tanto, temporales (Desphande, P.Y. “El
auténtico Yoga”).
3.14(132): yadā tu sāmānyena
samanvāgato bhavati, tadā dharmi-svarūpa-mātratvāt
ko’sau kena bhidyate?
Pero cuando
(la forma) se sumerge (de nuevo) en la raíz común (en la substancia, dharmin), siendo entonces de la misma naturaleza que la substancia, ¿cómo podría esa forma diferenciarse de otra?
3.14(133): tatra trayaḥ
khalu dharmiṇo
dharmāḥ śāntā uditā avyapadeśyāś
ceti | tatra śāntā ye kṛtvā
vyāpārānuparatāḥ | sa-vyāpārā uditāḥ
| te cānāgatasya lakṣaṇasya
samanantarāḥ | vartamānasyānantarā
atītāḥ | kim
artham atītasyānantarā na bhavanti vartamānāḥ? pūrva-paścimatāyā
abhāvāt | yathānāgata-vartamānayoḥ
pūrva-paścimatā naivam
atītasya |
Como es
sabido, en la substancia hay tres formas: inmóviles (pasadas), activas
(presentes) e indeterminadas (futuras). De éstas, las inmóviles son aquellas
que, habiendo estado activas, han cesado ahora en su actividad; las activas son
las que (ahora) están ejerciendo sus funciones y tienen como procedencia
inmediata la fase temporal futura. Igualmente, las que están (ahora) en el
pasado tienen como procedencia inmediata el presente. ¿Por qué la presente no procede de la pasada? Porque
(entre ellas) no hay relación de antes y después.
3.14(133): tasmān nātītasyāsti
samanantaraḥ | tad anāgata eva samanantaro bhavati vartamānasya
|
La relación
de anterioridad y posterioridad en el caso del futuro con el presente, no es la
misma que la existente entre el presente (y el pasado). No hay posterioridad en
el pasado. De la misma forma, en el futuro solo hay anterioridad respecto del
presente.
—Vyāsa reflexiona sobre el motivo por el cual existe una dirección
en el tiempo, es decir, el por qué el futuro sigue al presente y el pasado
precede al presente. Para ello apela a una relación de “antecedente-consecuente” que no se da entre el pasado y
el presente pero sí entre el presente y el futuro. Así entre el futuro y el
presente se da esa relación mientras que entre el presente y el pasado no. Esta
relación de “antecedente-consecuente” se basa en la contigüidad de
estados externos de la substancia. Este comentarista, al glosar el aforismo
siguiente, aclara que entre el futuro y el presente sí se da dicha contigüidad
de estados como en el caso de una pella de barro (estado1) y el de una jarra de
barro moldeada por el alfarero (estado2) si bien no se da entre el pasado y el
presente lo cual determina la dirección temporal. Lo importante, más que las
razones expuestas, es resaltar que se plantea la direccionalidad del tiempo (Buendía, Emilio García “El yoga como sistema filosófico”, pag, 372).
3.14(133): athāvyapadeśyāḥ ke? sarvaṃ sarvātmakam iti |
¿Cuáles son (las formas, dharma) indeterminadas? Todo participa de la naturaleza de todo.
3.14(133): yathoktaṃ—jala-bhūmyoḥ pāriṇāmikaṃ
rasādi-vaiśvarūpyaṃ sthāvareṣu dṛṣṭaṃ,
Sobre esto se
ha dicho: “toda forma, como el sabor y otros (elementos
sutiles), se encuentra contenida en (los elementos más toscos, como) el agua,
la tierra, etc.; (igualmente, estos elementos) se pueden observar en las
plantas y (éstas, a su vez) en los animales”.
3.14(133134): tathā sthāvarāṇāṃ
jaṅgameṣu jaṅgamānāṃ
sthāvareṣv iti | evaṃ jāty-anucchedena sarvaṃ sarvātmakam
iti |
Así pues,
dado que la naturaleza común no se destruye, todo, independientemente de su
clase, posee la naturaleza de todo.
3.14(134): deśa-kālākāra-nimittāsambandhān na khalu
samāna-kālam ātmanām
abhivyaktir iti |
Sometidas a
las influencias de lugar, tiempo, forma y causa, las formas no se manifiestan
de manera simultánea.
3.14(134): ya eteṣv abhivyaktānabhivyakteṣu dharmeṣv
anupātī sāmānya-viśeṣātmā
so’nvayī dharmī |
Lo que
permanece a través de estas formas, sean manifiestas o no, que está presente en
todo pero es distinto de todo (anvayin), cuya esencia es tanto particular como genérica,
es la substancia.
3.14(134): yasya tu dharma-mātram evedaṃ niranvayaṃ tasya bhogābhāvaḥ
|
Pero para
algunos (idealistas, principalmente del budismo yogācāra, o vijñānavāda) que
mantienen que este mundo son solo formas sin soporte permanente alguno, no
podría haber experiencia.
—En III.13 Patañjali emplea el término dharma en el sentido técnico de “forma”, la cual es de naturaleza
cambiante. Esta contrasta en III.14 con el concepto de “poseedor del dharma” (dharmin), la
naturaleza esencial subyacente o ·substancia” inmutable (en oposición a la forma cambiante). Prakṛti es la “substancia” permanente (dharmin) y sus series de
transformaciones son las formas (dharma). Aplicando la doctrina satkāryavāda, la cual afirma que los cambios afectan solo a la forma del objeto y
no a la substancia que subyace, Patañjali
diferencia tres formas o estados de un objeto: su aspecto “apagado” (śānta) o pasado, su aspecto “actual” (udita) o presente, y su aspecto “indeterminado” (avyapadeśya) o futuro. Los tres están
relacionados con la misma “substancia” o “poseedor
del dharma”, siempre presente, aunque no
puede estar contenida por (y por tanto es diferente de) sus modificaciones o
formas; es decir, asume muchos cambios pero éstos no la definen completamente. Vyāsa contrasta explícitamente
este punto de vista con la doctrina budista del anātman, el no-yo o negación de la
esencia, según la cual existe una multiplicidad de formas cambiantes pero no
subyace ninguna esencia o substancia (Witcher, Ian “The Integrity of
the Yoga Darshana”).
—La substancia se encuentra presente en todo momento
en sus formas. Las formas inmóviles son las que han sido, las activas son las
que son, y las indeterminadas son las que serán, es decir, las que en este
momento son todavía posibilidades latentes. Las tres están relacionadas con la
misma substancia. Vyāsa
contrasta explícitamente esta opinión con la concepción budista del anātman o inesencialidad, según la cual
solo hay miríadas de formas cambiantes pero sin substancia soporte. Los tres
tipos de transformación se pueden entender como las diferentes formas en que se
puede observar el efecto del cambio en una substancia (Feuerstein, Georg “The
Yoga-Sūtra of Patañjali”).
3.14(134): kasmāt? anyena
vijñānena kṛtasya
karmaṇo’nyat kathaṃ bhokṛtvenādhikriyeta?
¿Por qué? Porque cuando una
conciencia (vijñāna) ha llevado a cabo una acción, ¿cómo podría otra (distinta) ser responsable (de tal
acción), en el sentido de experimentar (sus efectos)?
3.14(134): tat smṛty-abhāvaś
ca nānya-dṛṣṭasya smaraṇam anyasyāstīti
|
Además no habría memoria de ésta (conciencia): nadie recuerda lo que
ha experimentado otro.
3.14(134): vastu-pratyabhijñānāc
ca sthito’nvayī dharmī yo dharmānyathātvam
abhyupagataḥ pratyabhijñāyate
| tasmān nedaṃ
dharma-mātraṃ niranvayam iti ||14||
A partir del
argumento del reconocimiento (reconocer un objeto supone admitir que su forma ha
cambiado), debe admitirse que hay una substancia permanente que persiste a
través de los cambios de forma. Por tanto, no es cierto que este mundo sea solo
cuestión de formas, sin (una substancia) presente en todo pero distinta de
todo.
—Una
substancia contiene todas sus características y, según la forma particular que
adopta, aparecerán las características que correspondan a esta forma. Sin
embargo, sea cual sea la forma, sean cuales sean las características visibles,
existe una base que las abarca todas. Ciertas características aparecieron en el
pasado, otras aparecen ahora y otras pueden revelarse en el futuro. Los sūtras III.9 a III.14
significan que todo lo que percibimos es un hecho, no una ficción (satkāryavāda). Pero estos hechos están sometidos al cambio (pariṇāmavāda). Estas dos teorías son las bases de toda esta
enseñanza (Desikachar, TKV “Yoga-sūtra
de Patañjali”).
—En III.9 Patañjali explica las tres fases de
la consciencia: emergente, siendo restringida y las pausas entre ambas. En III.10
describe estas pausas como una consciencia tranquila. Si se las prolonga, se
unen la omnidireccionalidad y la unidireccionalidad, sin que haya espacio para
la emergencia o la restricción de los pensamientos (III.11).
El sūtra III.12 explica que mantener esos momentos
tranquilos provoca un estado de consciencia equilibrado, que en III.13
aparece descrito como un estado cultivado y armonioso. La emergencia y
restricción de los pensamientos son las tendencias (dharma) de citta, y el estado tranquilo es su cualidad característica (dharmin) (Iyengar, BKS “Luz sobre los Yoga Sūtras de
Patañjali”, p.
284).
Bhoja —
Rāja-Mārtanda (1018-1060)
||3.14||
śāntā yē
kṛtasvasvavyāpārā atītē.dhvani anupraviṣṭāḥ,
uditā yē.nāgatamadhvānaṅ
parityajya vartamānē.dhvani
svavyāpāraṅ kurvanti,
avyapadēśyā yē
śaktirūpēṇa sthitā
vyapadēṣṭuṅ na śakyantē tēṣāṅ
niyatakāryakāraṇarūpayōgyatayā.vacchinnā
śaktirēvēha dharmaśabdēnābhidhīyatē.
taṅ trividhamapi
dharma yō.nupatati anuvartatē.nvayitvēna
svī karōti sa śāntōditāvyapadēśyadharmānupātī
dharmītyucyatē. yathā suvarṇaṅ rucakarūpadharmaparityāgēna
svastikarūpa dharmāntaraparigrahē
suvarṇarūpatayā.nuvartamānaṅ
tēṣu dharmēṣu
kathaṅcidbhinnēṣu dharmirūpatayā sāmānyātmanā
dharmarūpatayā viśēṣātmanā
sthitamanvayitvēnāvabhāsatē.
Las que
están en reposo son aquellas que, habiendo realizado sus respectivas funciones,
han ingresado a la fase anterior. Las que están en actividad son aquellas que,
habiendo abandonado la fase ulterior, realizan sus respectivas funciones en la
fase presente. Las indefinibles son aquellas que, existiendo en forma de
potencia (śakti), no pueden ser definidas. Y
así, por ejemplo, se dice que todo está contenido en todo. Con la palabra “forma constitutiva” (dharma), se indica aquí sólo la potencia (śakti), limitada por su conformidad a una causa y un
efecto determinados. Y aquello que se conforma, a esto, que depende de esta
triple forma constitutiva y se apropia de ella como consecuencia necesaria, es
llamado una substancia, la cual se conforma a. sus formas constitutivas, sean
en reposo, o en actividad, o indefinibles. Así el oro, por ejemplo, sigue
conservando su naturaleza de oro al abandonar una determinada forma
constitutiva, representada por un collar, para adoptar otra determinada forma
constitutiva, representada por un adorno en forma de svastika; en estas formas
constitutivas, en cierto modo diferentes, se presenta consecuentemente como
estable, en virtud de su carácter de identidad en tanto que substancia y de su
carácter de particularidad en tanto que forma constitutiva.
Śaṅkara — Yoga-Bhāṣya-Vivaraṇa
(s. VIII-XIV?)
En un
substrato permanente, tras la cesación de una forma, surge otra y esto se
denomina cambio. Lo que siempre se encuentra en las formas, estén inmóviles,
activas o indeterminadas, que posee una naturaleza indivisible dentro de lo
dividido, es la substancia (dharmin). La
substancia cambia como las ondulaciones de la ropa, y esta potencialidad de
circularidad son las formas, las cuales existen en la substancia, aunque no se
encuentren manifiestas. Igual que un trozo de oro, en distinto lugar y tiempo,
produce artículos diversos como pendientes, etc., es evidente que surgen de él
distintos productos, por lo que se infiere que la substancia tiene existencia
real. Las formas se distinguen de acuerdo a su actividad, pero no se distinguen
de algo que se ha retrotraído a su causa. Cuando una impresión latente (saṃskāra) activadora (del estado mental ordinario) se ve
superada por otra inhibidora, la primera entra en el pasado y sale del
presente. Pero es algo que reaparecerá en el futuro para volverse entonces
presente, aunque no en secuencia directa (desde el pasado). Por ello, se afirma
que el futuro sigue al pasado.
Objeción: si todo participa de la naturaleza de todo,
entonces todo se percibiría por todas partes y nunca se percibiría el dolor
ante la separación de las cosas queridas.
Respuesta: existe restricción impuesta por las influencias de
lugar, tiempo, forma y causa, por lo que las cosas no se manifiestan de forma
simultánea. Así, existen cosas tales como el dolor producido por la separación
de lo que se quiere. Dado que en cada caso, las causas (influyentes) son muy
numerosas, la forma (futura) no puede ser determinada.
Respecto a
quien considera que solo hay conocimiento, puesto que la forma perece a cada
instante, nunca se alcanzaría el estado de pasado, futuro y presente en el
mismo momento, con lo cual no podría existir una relación entre lo
experimentado y lo que experimenta.
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